miércoles, 25 de febrero de 2009

"Sácame la madre, dime maraca si quieres. Pero no te voy a permitir que digas que soy partidaria de Longueira"

Hoy, en una oficina cualquiera, de un servicio público cualquiera, un funcionario tiene la osadía de decirle a una funcionaria que es partidaria de Longueira, recibiendo inmediatamente la respuesta.